El langostino del Mar Menor tiene serias amenazas. El cangrejo azul y las lubinas, que los devoran en la laguna, se suman a los altibajos de su propio ciclo de vida. Sin embargo el calor extremo de este otoño ha sido la principal causa de la reducción de capturas de este apreciado marisco en el final de la campaña de otoño, que tendrá su punto final el 15 de noviembre.
Entre un kilo y medio y 10 kilos llegan a la lonja de San Pedro del Pinatar en este final de campaña de otoño, nada parecido a la de primavera, cuando se recogieron 3.656 kilos, mientras que desde el 10 de septiembre han caído en las redes 1.859 kilos.
Los precios han oscilado cada día en función de la cantidad de langostinos que ha llegado a la subasta, con valores de entre 30 y 90 euros. La poca cantidad ha desanimado a los pescadores, y cada día son menos los que calan las langostineras. En la última semana, los barcos que se han dedicado a la pesca del langostino no han pasado de la veintena.
