La Guardia Civil ha detenido al conductor de un turismo, por circular por la autovía A-30, a la altura del término municipal de Cartagena con un índice de alcohol en sangre que superaba cinco veces la tasa máxima de alcoholemia, lo que ha puesto en grave riesgo la vida e integridad física de los usuarios de la carretera.
Los hechos tuvieron lugar cuando la Central Operativa de Tráfico (COTA) de la Benemérita fue alertada, a través de un guardia civil fuera de servicio, de que un turismo circulaba de modo errático a la altura del kilómetro 180 de la autovía A-30, que une las localidades de Albacete y Cartagena, sentido Cartagena, describiendo sucesivos y peligrosos desplazamientos en zig-zag entre ambos carriles de la calzada, llegando en algún momento a rozar con la barrera metálica de protección (bionda).
El agente, que se desplazaba con su vehículo particular en el mismo sentido que el turismo, consiguió, con el apoyo del conductor de un tercer vehículo, ocupar en forma paralela los dos carriles de la autovía y retener el tráfico de los vehículos que circulaban detrás, para evitar un inminente accidente, a la vez que daba instrucciones a su compañera para que avisara al COTA con la finalidad de que desplazara un patrulla que pudiera interceptarlo y controlar la situación.
Inmediatamente se movilizó una patrulla de motoristas del Destacamento de Tráfico de Cartagena que detectó, a la altura del kilómetro 184 de la autovía A-30, la presencia de este vehículo, que circulaba de una forma manifiestamente irregular por lo que, adoptando las debidas medidas de seguridad, procedieron a sacarlo de la autovía para evitar mayores riesgos y trasladarlo hasta un lugar habilitado a la altura del kilómetro 10 de la carretera RM F-36 (Torre Pacheco-Cartagena), en las proximidades de Los Barreros-Cartagena.
Los agentes apreciaron en ese momento que su conductor aparentaba indiciariamente no encontrarse en las condiciones adecuadas para conducir, posiblemente a consecuencia de la ingesta de algún tipo de sustancias incompatibles con la conducción.
Por este motivo, el conductor –varón, español, de 60 años y vecino de Cieza– fue sometido a las preceptivas pruebas de alcoholemia en las que arrojó un resultado positivo de 1,36 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, en sendas pruebas reglamentarias que se le practicaron, quintuplicando la tasa máxima permitida de 0,25 mg/litro.
Ante estas circunstancias, el conductor, que se trasladaba desde Murcia hasta Cabo de Palos, fue detenido como presunto autor de delito de conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, al superar con creces las tasas establecidas, siendo puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Cartagena (Murcia), para la celebración de juicio rápido.
Dada la elevada tasa de alcoholemia, el vehículo quedó inmovilizado, debido a la peligrosidad que comporta la circulación de un vehículo en estas condiciones y la merma de reflejos que la influencia de alcohol supone, hasta que a mediodía del día siguiente, sometido de nuevo su conductor a la prueba de alcoholemia, arrojó resultado negativo y, verificado que se encontraba en condiciones para conducir, pudo retirar el vehículo para continuar el viaje proyectado, levantándose entonces dicha medida cautelar.
El delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, con tasas superiores a 0,60 miligramos/litro, se encuentra recogido en el artículo 379 del Código Penal y puede ser castigado alternativamente con penas de prisión de 3 a 6 meses, multa de 6 a 12 meses, o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y en cualquier caso con privación de derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a 1 y hasta 4 años.
La Guardia Civil sigue reiterando su mensaje a aquellos conductores que de forma imprudente y temeraria, a pesar de las campañas y advertencias de la Dirección General de Tráfico, conducen después de haber bebido o tomado drogas, recordando que, sin perjuicio de la sistemática realización de controles preventivos ordinarios o especiales, que se incrementarán en particular de cara al verano, dado el elevado de número de desplazamientos, en especial en trayectos cortos, y actividades de ocio que se producen en esta época, se practicarán las preceptivas pruebas de alcoholemia y drogas a todos los conductores que sean denunciados por la comisión de infracciones, implicación en accidentes o aquellos otros en que se detecte su consumo en el curso de otras actividades de vigilancia e inspección que se lleven a cabo.
Estas actuaciones tienen la finalidad de concienciar a los ciudadanos de la incompatibilidad de estas sustancias con la conducción, dada la merma de reflejos y capacidades que para el control de los vehículos suponen, y garantizar así la seguridad vial en nuestras carreteras, evitando, de esta forma, la producción de accidentes de circulación y las graves consecuencias, que como en este caso pudieran haber acarreado, apelando al empleo de medios de transporte colectivos o fórmulas alternativas para estos desplazamientos que no sean ponerse al volante en estas condiciones, sobre todo por parte de los conductores más jóvenes.
La Guardia Civil apela a la conciencia cívica de la población para que, sin dudarlo, como en este caso, un guardia civil fuera de servicio, avisen al teléfono 062 (Guardia Civil) o 112 (Emergencias), cuando se encuentran con situaciones anómalas o maniobras irregulares que den lugar a pensar que los conductores lo hacen bajo la influencia de drogas o alcohol, con la finalidad de poder adoptar las medidas policiales oportunas para que estos vehículos sean interceptados y comprobado si sus conductores se encuentran en las condiciones adecuadas para circular con garantías de seguridad, evitando el consiguiente riesgo.
Cerca de 4.000 conductores controlados durante el fin de semana
Durante el pasado fin de semana y en los diferentes dispositivos de verificación de alcoholemia y drogas desplegados, la Agrupación de Tráfico de la Región de Murcia ha controlado a un total de 3.851 conductores, de los cuales 69 arrojaron resultado positivo en alcohol (1,79%). Entre éstos se ha detenido a seis conductores por hacerlo bajo la influencia de alcohol, que han sido puestos a disposición judicial, y el resto han sido denunciados por infracción administrativa (alcoholemia) ante la Jefatura Provincial de Trafico de Murcia. Así mismo han sido denunciados 56 conductores por circular habiendo consumido drogas u otras sustancias estupefacientes prohibidas e incompatibles con la conducción de vehículos (cocaína, cannabis, opiáceos, anfetaminas y metanfetaminas).