Solo bañador y gorro de Papá Noel. A los 32 participantes de la VI edición del Baño de Navidad no les ha importado la baja temperatura de las aguas del Mar Menor -más frías en invierno que las del Mediterráneo por la escasa profundidad- para lanzarse desde la plataforma del Club Náutico de Los Alcázares. Este chapuzón gélido, solo apto para valientes, se ha convertido ya en tradición navideña impulsado por la Concejalía de Deportes.
El pasado año participaron 20 personas, una cifra que la convocatoria de este año se ha superado con los 32 nadadores que saltaron desde la plataforma que la Concejalía de Deportes ha instalado en el Club Náutico de Los Alcázares.El concejal de Deportes, Francisco Montesinos, se encargó de dar la señal de salida.
Tras el chapuzón, todos los nadadores recibieron un albornoz y un caldo con pelotas para reconfortar el cuerpo tras el frío baño.