Los vecinos de Los Alcázares no bajan la guardia en la reivindicación de soluciones para las inundaciones. Esta noche, miércoles, han vuelto a concentrarse, esta vez en la puerta del Ayuntamiento, para reclamar las obras necesarias que eviten nuevas pérdidas a causa del agua descontrolada. Unas botas gigantes en el monolito de la Independencia conmemoran el tercer aniversario de las peores riadas, el 18 de diciembre de 2016.
"Hace tres años me estaban sacando los bomberos de mi casa con el agua al cuello", contaba esta misma tarde Diosdada junto al monumento conmemorativo del tercer aniversario. "El seguro que dio entonces 6.000 euros y pude arreglar todo lo que se dañó, pero ahora he vuelto a perderlo todo, y dicen que ya no hay dinero", explica la jubilada.
"No nos valen ya las noticias en prensa diciendo que se va a arreglar, no nos valen ya los políticos diciendo que se tramitará en los parlamentos, ni nos valen ya las palmaditas en la espalda para hacernos callar", dijo la escritora Pilar Álvarez, de la asociación Los Alcázares EcoCultural, ante varias decenas de vecinos. "Llegaremos hasta donde haga falta para que se cumpla la ley y que los alcazareños podamos volver a dormir en paz", afirmó la portavoz de la asociación cultural.
Por su parte, el portavoz de STOP INUNDACIONES, Santiago Pérez Blaya, animó a los vecinos a "seguir todos unidos y participar en todas las iniciativas que consideremos oportunas para proteger nuestro pueblo y el Mar Menor". En el tercer aniversario de las peores inundaciones registradas en toda la historia de Los Alcázares, aseguró que "desde entonces hemos visto cin o seis veces correr el agua por las calles". "Hemos pedido ayuda, pero vemos que se invierte más en reparaciones que en soluciones", dijo el protavoz.
“No estamos dispuestos a esperar tres años, señor Urrea”, le ha transmitido al presidente de la CHS, Mario Urrea. “Esto no es forma de vida. Nos está invitando a que nos marchemos de nuestro pueblo”. El portavoz de los afectados anunció a los vecinos que las próximas manifestaciones se organizarán en los lugares críticos, que tienen relación con las causas de las continuas riadas. "La próxima será junto a los tres tubos que estrangulan el canal D-7", adelantó Blaya.
Reclamó "ver a los responsables del desvío de las ramblas y canales". "Ya hemos pedido a los servicios jurídicos que busquen a los responsables de los desvíos que causan la bajada violenta de las aguas por el polideportivo", anunció. "No podemos vivir sin tranquilidad en nuestras casas. Esa tranquilidad tenemos que conseguirla cueste lo que cueste", afirmó el portavoz de los afectados.
UNAS BOTAS GIGANTES PARA NO OLVIDAR LA SOLIDARIDAD DE LAS RIADAS
Las botas de agua gigantes recordarán a los cientos de voluntarios que llegaron para ayudar a los vecinos en la Navidad de 2016.
El alcalde de Los Alcázares, Mario Pérez Cervera, ha recordado que "hace tres años perdí mi casa y mi vehículo, y al recordarlo me he dado cuenta de que ya no me dolía porque lo hemos normalizado, pero me niego a que las inundaciones se normalicen en mi municipio". "Confío en que la unidad de Los Alcázares, que se demostró en la manifestación de septiembre, sin distinción de ideologías, haga que lo consigamos", afirmó el regidor.
Dos botas gigantes de agua, realizadas por el escultor murciano Manuel Pérez Álvarez, quien se ha inspirado en una fotografía de Aurora Mora, realizada durante las ingentes tareas de limpieza de los cientos de voluntarios que acudieron a ayudar a las familias a sacar el barro de sus casas. “Necesitamos unirnos en una sola fuera de todos para que la Confederación Hidrográfica del Segura y la Comunidad Autónoma nos escuchen por fin después de tres años”, dijo. Sobre el impacto económico que han supuesto las riadas, Pérez Cervera ha asegurado que “las de 2016 costaron 50 millones, y las del pasado septiembre, 200 millones. ¿No es más fácil aplicar la solución, que cuesta 80 millones?”.
