Los jóvenes de Los Alcázares no se quedan impasibles ante el problema de las inundaciones, que azota una y otra vez a las familias. Esta tarde han 'sembrado' la puerta de la Asamblea regional, en Cartagena, con más de 200 botas de agua, algunas aún manchadas del barro de las últimas inundaciones, para protestar por la demora de las obras que aminoren el daño de las riadas en el casco urbano.
La recién creada Red de Jóvenes Alcazareños se ha puesto en marcha para lanzar su mensaje a los representantes políticos de la Región. Han ido puerta por puerta recogiendo las botas para marcarlas con el nombre de los propietarios con el fin de devolverlas después.
Querían "que cada par de botas represente a los alcazareños, ahora que con la epidemia no se pueden manifestar igual", explica Osama Alalo, uno de los jóvenes que se han movilizado para pedir medidas de protección frente a las avenidas de agua. Su propia familia perdió gran parte de sus muebles y enseres con las riadas de septiembre, así que sabe lo que puede hacer el agua en la vida de las personas.
"Somos jóvenes de varias nacionalidades, porque el agua no distingue de dónde eres; todos en Los Alcázares padecemos las consecuencias", explica Osama. Después de colocar las 200 botas mirando hacia la puerta de la sede parlamentaria regional, han leído un manifiesto:
"Las inundaciones no entienden de virus, los alcazareños lo sabemos mejor que nadie, no hemos podido, ni siquiera durante la pandemia, desarrollar nuestras vidas con normalidad. En la primera semana del confinamiento sufrimos otra vez el paso del agua por nuestro pueblo, y una vez más, nuestros vecinos tuvieron que sacar agua de sus casas. Y no solo eso, hace apenas tres semanas, volvimos a mirar con miedo al cielo con temor por si ocurría lo mismo.
Las inundaciones, el Mar Menor, nuestra situación, no se soluciona aunque estemos en una pandemia. La inacción de las instituciones se ha acrecentado durante el estado de alarma, aprovechando que el foco mediático miraba a otro lado, y esto no puede seguir así. Por eso, para dar voz a nuestros vecinos y vecinas, vamos a llevar a cabo una acción reivindicativa, porque el problema sigue presente. Vamos a llenar la zona exterior de la Asamblea Regional con botas, símbolo que, desgraciadamente, nos ha acompañado desde 2016. Entendemos la situación de pandemia, y por ello, serán las botas las que representarán a los alcazareños y alcazareños, al pueblo y su lucha".
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