El tanque de tormentas de Los Alcázares, que no ha funcionado desde su construcción en 2016, ha motivado un enfrentamiento entre el consejero de Agricultura, Agua y Medio Ambiente, Antonio Luengo, y el Ayuntamiento alcazareño.
"No es de recibo que se hagan las actuaciones y que el Ayuntamiento no lleve a cabo el mantenimiento, porque esto no hubiera pasado si hubiera recepcionado la obra", afirmó el consejero Antonio Luengo el pasado viernes en San Javier. Luengo reconoció que "a posteriori el Ayuntamiento manifestó que había que llevar a cabo una infraestructura auxiliar".
El concejal de Medio Ambiente de Los Alcázares, Antonio Luis López Campoy, ha respondido al reproche del consejero con un comunicado en el que expresa que "la Dirección General del Agua, perteneciente a su propia Consejería, ha expresado ya su compromiso de invertir en la reparación del tanque de tormentas porque saben y asumen que es de su competencia arreglar los desperfectos que impiden que funcione".
"El Ayuntamiento no puede recepcionar el tanque de tormentas mientras no se subsanen las deficiencias técnicas que debe acometer la Comunidad Autónoma", afirma el concejal. López Campoy asegura que el propio director general de Aguas, Sebastián Delgado, "barajaba alternativas al tanque al carecer de una red de pluviales, siendo necesaria la inversión de otros 2 millones de euros para colocar unos tubos que conduzcan las aguas del tanque a la depuradora",
El edil asegura que "se ha tirado a la basura 1,2 millones de euros que bien se podían haber invertido en medidas de protección del Mar Menor". Destaca que "varios informes advierten de las deficiencias y gravísimas consecuencias sobre todo para el Mar Menor". El Ayuntamiento señala informes de la empresa Aqualia, que ya alertaron en 2016 de que las deficiencias del tanque de tormentas construido por la Comunidad Autónoma podía provocar "el desbordamiento del alcantarillado".
En concreto, el informe que el Ayuntamiento aporta de Aqualia recoge que "dado que las compuertas instaladas no son estancas no se puede proceder a conectar el aliviadero de residuales al depósito laminador" y advierte de que "si se efectúa dicha conexión se corre el grave riesgo de verter aguas residuales hacia la playa contaminando una zona especialmente sensible como es el Mar Menor".
El informe de fecha 1 de julio de 2021, advierte de deficiencias en las compuertas del tanque de tormentas que "no son estancas" y, por tanto, "no se cumple la condiciones de cierre hermético y el tanque con la compuerta cerrada se sigue llenando de agua, por lo que se inunda todo el tanque de tormentas y por rebose, pasa al aliviadero por lo que el alcantarillado entra en carga y se desbordan las aguas al Mar Menor". "Dicha deficiencia es muy grave" dice el informe "puesto que inundaría la red de alcantarillado en caso de llenarse a el tanque por lluvias.
El Gobierno local de Los Alcázares ha pedido "la dimisión del máximo responsable del estado del Mar Menor, Antonio Luengo, por defender los intereses de quienes incumplen la ley diariamente y contaminan el Mar Menor", ha asegurado en un comunicado.
