Pasteles de sabor celestial y utilidad benéfica

Gastronomía
Fuente

Delicias dulces que continúan el recetario tradicional de la repostería murciana y, además, proporcionan ayudas a familias en apuros. Es lo que se cuece en el obrador del convento San Antonio de Algezares de la orden de la Inmaculada Concepción, donde trabajan las monjas al máximo rendimiento desde que hace cuatro años fuera restaurado en este monsterio de 1400.

 

"El 40% de los beneficios los destinamos a casos muy concretos, como pagar recibos de la luz, libros de texto y otras necesidades de familias que nos facilitan los Servicios Sociales", indica Sor María, una de las hermanas que trabaja en la producción de la pastelería monacal. "Compartimos lo que tenemos, no lo que nos sobra y, desde luego, no son momentos de volver la vista atrás", explica.

Las hermanas pasteleras cuentan con clientela fiel que asiduamente acude al convento para comprar los rollos de naranja, los polvorones y otras delicias. "Cada año hacemos alguno nuevo, pero ya tenemos más de 26 productos en el mercado, desde nevaditos de azúcar glas a mantecados naturales", afirma Sor María, quien recomienda especialmente "los polvorones, con almendras cogidas y vareadas especialmente por nosotras en JUmilla". Todos los productos que las monjas emplean en los pasteles están adquiridos de proveedores de la Región, desde el aceite de las almazaras locales hasta la harina.

De sus hornos salen variados sabores de gloria, pero destaca sobre todo el Pastel de Santa Beatriz, según la receta del antiguo pastelón de la huerta tradicional. "Lo hacían en las casas de la huerta cada 17 de agosto, la festividad de Santa Beatriz, para regalar al médico, al jardinero o al sacerdote" explica Sor María sobre este dulce que está relleno de fruta escarchada y cabello de ángel, y cubierto de azúcar glas. "Con vino dulce está delicioso", sugiere la religiosa.

Otra de las delicias especiales es la Roca de la Fuensanta que, según Sor María, se realiza "atemperando el chocolate en el mármol, como antiguamente, y caramelizando la almendra". Ninguno de los productos del convento llevan colorantes ni conservantes. Sor María destaca los dulces que elaboran con boniato, las tortas de Pascua, las galletas de chocolate y las rosquillas, que se conservan en perfecto estado durante dos o tres meses si se guardan en un envase hermático.

Un capricho que hay que probar si se pasa por el convento son las Antonias, unas pastillas de café con leche que las hermanas hacen "con mucho cariño y en un cazo, moviendo con cuchara de madera despacito". Sor María recomienda especialmente los roscones de Reyes, cuya masa es una auténtica nube celestial en el paladar. Los productos de las hermanas del obrador de San Antonio de Algezares ya se pueden comprar en algunos supermercados de la Región.

Entrevista realizada en directo en el programa LA GRAN EVASIÓN de Metrópolis FM (cada día de lunes a jueves de 5 a 7 en el 101.5 para Cartagena y Mar Menor y en el 92.6 para Murcia. También en www.metropolisfm.es

Publicidad

PRÓXIMOS EVENTOS

28,10,0,50,1
600,600,60,0,3000,5000,25,800
90,150,1,50,12,30,50,1,70,12,1,50,1,0,1,2000
Powered By Creative Image Slider
leer más
leer más
leer más
leer más
leer más