Un colector recogerá las aguas de lluvia que bajan de los campos de El Mirador y alrededores, y las conducirá por la calle Jabalina hacia el otro colector ya instalado en el subsuelo de la calle Cabo Huertas, junto al instituto Mar Menor. Allí, otro ramal recogerá las aguas del barrio de los Pescadores y circularán hacia unos futuros tanques de reserva para ser tratadas en la depuradora.
Las aguas de lluvia no solo evitarán las inundaciones de los barrios de Los Ríos y de los Pescadores, que se repiten con cada episodio de lluvias, sino que se convertirán en caudales útiles para el riego. La primera fase de esta obra comenzará antes de final de este año, según confirmó el presidente regional Fernando López Miras al alcalde de San Javier, José Miguel Luengo, ayer lunes, en una reunión.
Sobre la mesa, figuraban algunos de los proyectos que el municipio tiene pendientes desde los últimos años, como la construcción de las instalaciones deportivas que completen la oferta del campus de la Facultad de Ciencias del Deporte. El presidente murciano se comprometió a acelerar los proyectos para construir el pabellón deportivo y el campo de fútbol en La Ribera, que no solo servirán para los alumnos universitarios, ya que estarán abiertos al uso de todos los vecinos.
Los dos responsables coincidieron en su apoyo al proyecto del Ministerio de Defensa para construir en la Academia General del Aire un Centro de Cultura Aeronáutica, que incluirá un Museo de la Patrulla Águila, destinado a convertirse en un nuevo aliciente turístico para esta localidad costera.
En la reunión, el presidente regional confirmó al alcalde que el proyecto para ampliar el instituto Mar Menor se presentará en los próximos meses. Las obras tiene como objetivo principal habilitar el aulario suficiente para concentrar en el mismo edificio todas las enseñanzas profesionales y liberar así parte del espacio ocupado en el conservatorio de música.
El alcalde además reiteró a López Miras la necesidad de que la Comunidad Autónoma financie el Conservatorio comarcal en igualdad de condiciones con los de Murcia, Cartagena o Lorca, que reciben el presupuesto íntegro de las arcas regionales, mientras que el de San Javier está financiado por el Ayuntamiento con un coste anual que ronda el millón de euros y una subvención regional de 115.000 euros.
